miércoles, 15 de febrero de 2012

PALABRAS Y NÚMEROS


Gloria Fuertes
(España)


PALABRAS Y NÚMEROS

En el cielo una luna se divierte.
En el suelo dos bueyes van cansados. 
En el borde del río nace el musgo. 
En el pozo hay tres peces condenados. 
En el seco sendero hay cuatro olivos, 
en el peral pequeño, cinco pájaros, 
seis ovejas en el redil del pobre, 
—en su zurrón duermen siete pecados—
Ocho meses tarda en nacer el trigo, 
nueve días tan solo el cucaracho; 
diez estrellas cuento junto al chopo. 
Once años tenía, 
doce meses hace que te espero, 
por este paraguas trece duros pago.

jueves, 2 de febrero de 2012

Wislawa Szymborska. El Número Pi


Ha fallecido hoy la poeta polaca Wislawa Szymborska. Sirva de afán por promover su lectura –o relectura– este poema que la galardonada con el Premio Nobel dedicó al número π.

El Número Pi


El número Pi es digno de admiración
tres coma uno cuatro uno
todas sus cifras siguientes también son iniciales
cinco nueve dos, porque nunca se termina.
No permite abarcarlo con la mirada seis cinco tres cinco
con un cálculo ocho nueve
con la imaginación siete nueve
o en broma tres dos tres, es decir, por comparación
ocho cuatro seis con cualquier otra cosa
dos seis cuatro tres en el mundo.
La más larga serpiente después de varios metros se interrumpe
Igualmente, aunque un poco más tarde, hacen las serpientes fabulosas
El cortejo de cifras que forman el número Pi
no se detiene en el margen de un folio,
es capaz de prolongarse por la mesa, a través del aire,
a través del muro, de una hoja, del nido de un pajaro,
de las nubes, directamente al cielo
a través de la total hinchazón e inmensidad del cielo.
Oh, qué corta es la cola del cometa, como la de un ratón!
Qué frágil el rayo de la estrella que se encorva en cualquier espacio!
Pero aquí dos tres quince trescientos noventa
mi número de télefono la talla de tu camisa
año mil novecientos setenta y tres sexto piso
número de habitantes sesenta y cinco céntimos
la medida de la cadera dos dedos la charada y el código
en el que mi ruiseñor vuela y canta
y pide un comportamiento tranquilo
tambien transcurren la tierra y el cielo
pero no el número Pi, este no,
él es todavía un buen cinco
no es un ocho cualquiera
ni el último siete
metiendo prisa, oh, metiendo prisa a la perezosa eternidad
para la permanencia.